La supervisión está íntimamente relacionada con la formación y construcción del rol
y función del Profesional de Apoyo a la Inclusión. Ésta práctica esta motorizada por el deseo que tiene cada A.T. o M.I. de querer verificar
la orientación de su tarea.
Creemos que el espacio de supervisión no radica en la búsqueda de LA solución perfecta, y tampoco se trata simplemente del ajuste al máximo de
la táctica que se llevará a cabo, sino de la verificación de la estrategia y de la posición del profesional respecto de la transferencia y de
la ética que regula el trabajo que se está realizando, así como la posibilidad de pensar y repensar continuamente la lógica de esa dirección.
No se trata de obturar ni de controlar, sino de dar lugar a la reflexión y a la pregunta, habilitando así luego con el alumno actos creativos,
un espacio donde lo subjetivo y singular del sujeto tenga lugar. Los espacios de supervisión los pensamos como un instrumento que el profesional
tiene para verificar el particular abordaje de lo real con lo que se encuentra día a día en el acompañamiento, en la escuela o en la casa,
en el contexto en el que se desarrolla su práctica.
Ahora bien, no consiste en establecer estándares inquebrantables o prefijados que postulan un Otro o un ¨deber ser¨, no hay manual con pasos
a seguir guiados por principios que petrifican o gobiernan el acto del A.T. o M.I. Pues la idea es que en una supervisión se produzcan
cuestionamientos y que se motorice la pregunta, la duda, que dé lugar al deseo para seguir pensando y repensando la práctica.
Y así devengan nuevas formas de actuar que reactualicen el trabajo del A.T. O M.I., contrarrestando el desgaste que a veces la cotidianeidad
puede generar. Se trata de propiciar un ámbito de reflexión y poder pensar distintas conceptualizaciones sobre la tarea.
Se recibió de psicóloga con Diploma de Honor en la Universidad de Buenos Aires. Realizó la Carrera de Especialización en Psicología Clínica de la Discapacidad de la U.B.A. y cursos de posgrados de Psicoanálisis en la Escuela de Orientación Lacaniana, Universidad de Buenos Aires, Centro de Salud Mental Ameghino, Hospital Ramos Mejía, entre otras instituciones. Además de haber participado de carteles de investigación en psicoanálisis, grupos de estudio y de supervisión.
Su práctica clínica la desarrolló fundamentalmente en el ámbito hospitalario, ya que formó parte durante del equipo de Pareja y Familia del centro de Salud Mental n°3 ¨Arturo Ameghino¨ y del servicio Infanto-Juvenil del Hospital ¨Ramos Mejía¨.
En el ámbito privado, trabajó como acompañante terapéutica, y actualmente realiza atención individual, de pareja y familia con orientación psicoanalítica en su consultorio privado.
Es directora de la Institución En-causar Psi, en donde se desempeñó inicialmente como coordinadora y supervisora de acompañamientos terapéuticos domiciliarios y educativos.